Tenía ganas de ir a un sitio con estrella Michelin, que no es lo mismo que ir a un sitio con estrella, porque de esos permítanme que os diga, hay pocos y además son difíciles de encontrar. Lo que sucedió bien sabe el de arriba es que viví una de las experiencias gastro más completas hasta el momento. Sitio con estrella y con Estrella.
El restaurante Villena, ubicado dentro del hotel Convento de Capuchinos, cuenta con un chef con estrella, Rubén Arnanz, creador de un menú degustación exquisito tanto en presentación como en sabor. Un menú que se disfruta lentamente, que estalla en boca y que no pierde los sabores de la buena materia prima local. Unos platos elaborados con mimo, en una cocina tradicional pero con un twist vanguardista y moderno. Un servicio impecable. Cada plato es una obra única que se termina en mesa. Sorprende con fuego, cerámica, madera, y olores a campo. No seré yo quien desvele el secreto de cada plato, me costó no realizar ninguna fotografía de sus más de diez increíbles propuestas. Pero desvelar esta locura gastronómica sería como enseñar las cartas antes de empezar a jugar una partida.
Amantes de la alta gastronomía y del buen gusto, no voy a ser yo quien os descubra sus cartas. Que sean vuestros sentidos los que disfruten en mesa de una de las propuestas gastro más interesantes de la ciudad de Segovia.
Foto fuente: restauranthotelbar.com
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